Y tú, ¿Eres o pareces?

domingo, 16 de diciembre de 2012

Estás a mi merced.

Pobre e ingenua niña... sueñas con alcanzar la luna con los los dedos, y te estiras y te estiras, das saltos para lograr obtener su brillo. Sin embargo, sabes que nunca vas a llegar, nunca...

Pequeña, sueñas demasiado. Hay peores cárceles que las palabras... a veces la esperanza es la peor de nuestras cárceles...

Te golpeas contra el cristal de tu barrera ciega. ¿No ves que no tienes futuro en esta senda? Cambia la ruta, tu tiempo se acaba, el reloj de arena no cesa su cuenta, no importa cuantos granos caigan, ninguno permanecerá encerrado en la copa.

Átate a mí. Átate. ¿Prefieres morir? ¿Prefieres la soledad, el vacío, la asfixia?

Sientes que te agotas, no puedes más... Has sido derrotada. Admite que has perdido, que te he ganado. Sí, soy tu miedo, quien te habla. Estás a mi merced... Admítelo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario