Y tú, ¿Eres o pareces?

domingo, 2 de noviembre de 2014

Trágate tu orgullo, o escúpelo.

Quiero escupir sobre tus versos, quiero escupir en tus estrofas.
Quiero estar orgulloso de que tengas ganas de acariciarte todo el cuerpo cuando piensas en mí,
quiero provocar tus ganas de que leas en voz alta algo de Bécquer cuando tu hogar está vacío.

Grita. 
Crea algo sucio.

Quiero tragarme mis palabras, quiero escupir lo que siento;
no puedo prometer algo bello, siquiera puedo asegurarte a mí mismo.
Mi cordura, mi paciencia, mi automutilación. 

Auto
destrucción.
Soy tóxico.
Grítalo.

 Di lo que quieres decir, no lo pienses, no lo suavices, no lo decores. Habla como un idiota.
Y si Walt Disney se anima a hacer una película sobre nosotros,
¿Quienes somos para escupirlo?
¿Quienes somos para estar orgullosos?

Solo somos un corazón helado compuesto por un puñado de acciones vacías,
guiadas por una montaña de sentimentalismos opuestos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario