¿Sabes qué? ¿Qué importa? ¿Qué
importa como sea, o como me vean? ¿Acaso eso lo hará más fácil?
¿Acaso decir como soy realmente hará que la gente se pare a mirar dentro de mí? O, ¿Acaso que diga como creo que me ven va a servir para que los demás simpaticen conmigo?
¿Y qué demonios importa si tengo pinta de ser un gilipollas arrogante, y luego lo que más me preocupa es mostrar todo lo que pienso? ¿Y qué demonios importa si realmente tengo miedo de muchas cosas, y el resto del mundo cree que soy un héroe y me enfrento a ellas?
¿Acaso decir como soy realmente hará que la gente se pare a mirar dentro de mí? O, ¿Acaso que diga como creo que me ven va a servir para que los demás simpaticen conmigo?
¿Y qué demonios importa si tengo pinta de ser un gilipollas arrogante, y luego lo que más me preocupa es mostrar todo lo que pienso? ¿Y qué demonios importa si realmente tengo miedo de muchas cosas, y el resto del mundo cree que soy un héroe y me enfrento a ellas?
Eso me da asco. Da asco que yo mismo
me juzgue, que el resto del mundo lo haga. Me da asco decir "Pues parece
buena chica", o decir "Parece buena chica, pero seguro que es una
zorra", si luego cada uno va a tener una opinión diferente.
¿Qué es lo mejor que podemos hacer?
Que nos importe una mierda.
Que todo el mundo alce las manos, que
suelte las sogas, que grite, que grite y no deje de gritar. Que diga
palabrotas, que recite poemas, que gima en voz alta, en susurros, que acepte
que le llamen gilipollas, o engreído, o sexy, o chupapollas, que acepte que
cada persona pensará de una forma respecto a él, y respecto a todo el mundo,
pero lo que verdaderamente importa es lo que tú pienses. Pero no lo que tú
pienses que eres, no.
Que pienses que te importa una mierda
todo.
Que le den a todo el mundo, y a mí primero, joder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario