Y tú, ¿Eres o pareces?

domingo, 22 de enero de 2017

Amante de las causas perdidas.

No sé si debo ubicarme yo, o ubicarnos a los dos.

Desde hace un tiempo que contemplo la vida desde un peldaño más del mundo ordinario, me siento un Dios griego que contempla cuan chiquititos son el resto de los mortales; buscan preguntas y respuestas a todo sin mecer la opción de no seguir creando preguntas para no necesitar respuestas.

Las personas no somos mapas, ni estamos compuestos por carreteras, ni alturas, ni números.
Las personas somos sentimientos.

Me he terminado por dar cuenta de que hay casos perdidos que no deben encontrarse, que hay personas que son completamente felices sin entenderse, y que lo único que necesitan es a alguien que les entienda tan poco como ellos mismo se entienden.

Qué bonito es ser una causa perdida en compañía de otra causa perdida.


No hay comentarios:

Publicar un comentario