Y tú, ¿Eres o pareces?

domingo, 25 de enero de 2015

La nariz roja del payaso.

Y de pronto te sientes completamente fuera de lugar.
Mírales. Solo mírales, no escuches, mantén el volumen en el tono de un ligero susurro del viento.

¿Puedes ver como sonríen?
¿Puedes ver como no pueden parar de moverse, de gritar, de saltar, de ser ellos mismos, su pasado, su infancia, su boca torcida, dolorosa en tu interior?

Está bien. Bien hecho. Ahora mira al otro lado.
Sí. Mira al otro lado.
¿Los ves a ellos?

 Están tristes, no quieren abrir los ojos. Están sellados con lágrimas. Las mejillas están rojizas de llanto.
 Empatía. Pasado. Futuro. Nada más que dolor y malos pensamientos. Da asco.

Muy bien, ya lo tienes. Ahora... Sitúate en el centro y escoge. Un lado... u otro...
¿Puedes? ¿Nada?

Vacío. Quieres reírte, mas más deseas llorar. Y no puedes.
Es doloroso, es... ¿Estás enfadado? ¿Dónde vas? ¿Te molesta no formar parte de ninguna de las dos opciones?

No te preocupes, no formarás parte de ello.
Nunca.
En cambio… Crea. Juega a ser dios y no seas conformista.

Crea tu tercera parte. Tu territorio. El centro.
No escojas. Solo sé tú mismo.